Arranque agorero y taciturno para un artículo de baloncesto, pero un Mundobasket sin ‘La Manudona’ es menos Mundobasket, y esto crea una sensación de melancolía y aflicción en el devoto del mundo de la canasta. La gran ausencia del combinado albiceleste será el alero bahiense Manu Ginóbili, de los San Antonio Spurs, que no podrá estar en la cita porque su equipo NBA hizo valer una cláusula para que no tenga acción, debido a una recuperación incompleta de la fractura por estrés en el peroné de la pierna derecha. El seleccionado dirigido por Julio Lamas tampoco podrá contar con los lesionados Carlos Delfino y Juan Gutiérrez. Sin duda, bajas muy sensibles para una selección seria candidata a todo. Toca compensar las ausencias con algo que pocos combinados atesoran, el alma. Si por algo se caracteriza el deporte argentino es por su afán de superación, su competitividad y ambición. El no dar nunca su brazo a torcer, luchar siempre hasta el final, sin importar las circunstancias.
Hay razones para sonreír baloncestísticamente hablando. Un cúmulo de jóvenes, talentosos e ilusionantes jugadores argentinos están llamando a la puerta del triunfo sin cesar. Marcos Delía (22 años), Matías Bortolín (21), Nicolás Laprovittola (24), Facundo Campazzo (23) y Tayavek Gallizzi (21) son los chaveas de la Selección Argentina para la Copa del Mundo FIBA España 2014. A esto debemos sumarle la experiencia y carácter de señores como Nocioni, Scola, Prigioni, Herrmann…
En pleno preparatorio para la gran cita, resaltar la participación de la selección argentina en dos certámenes ‘Tres Naciones’. El primero en Río de Janeiro con triunfo ante Angola y derrota ante Brasil y el segundo, como local en Buenos Aires, con victorias ante México y revancha frente a Brasil.
Hoy jueves, está previsto que la selección argentina aterrice por tierras españolas para aclimatarse a las ciudades y al país y jugar amistoso el lunes 25 contra la selección española en Madrid. El pasado fin de semana, en Belgrado, disputó un torneo ‘Cuatro Naciones’ junto con Serbia, Turquía y Puerto Rico. Contando sus encuentros por derrotas, perdió las semifinales por 85-67 ante el anfitrión y el 3º y 4º puesto ante los boricuas por 97-87.
Acá el plante de La Celeste y Blanca.
Bases:
Pablo Prigioni: Basket control, domina los tempos y el control del partido a las mil maravillas. Excelente en la toma de decisiones. Maestro como pocos en el Pick and Roll. Buen tiro desde el 6´75 y gran asistente. Carácter y veteranía. Sufre en defensa ante bases veloces y verticales desde el drible.
Facundo Campazzo: Bajito y veloz. Creador de juego, buen tirador tras bote o tras salida de bloqueo directo. Buenos porcentajes desde el triple. Buena visión de juego, creatividad e inteligencia. Su agresividad, concentración y velocidad en defensa lo convierten en una mosca cojonera.
Nicolás Laprovittola: Base puro, poco atlético. Efectivo atacando al aro debido a su potente primer paso y fundamentos ofensivos. Buen tirador, tras bote y con pies fijos. Su talón de Aquiles está en la defensa, donde sufre en demasía.
Aleros:
Selem Safar: Ágil y veloz. Buena capacidad ofensiva. Tirador, que no es lo mismo que metedor. Tira mucho y su juego se basa principalmente en ello, salvo alguna jugada esporádica donde busca la penetración o el Pick and Roll.
Marcos Mata: Alero alto, fuerte, atlético. Su principal aval es el lanzamiento de 3 puntos. Recibir y anotar. Tiene problemas a la hora de crearse su propio tiro. Debido a sus potencialidades físicas la defensa es su fuerte.
Andrés Nocioni: Una roca para el puesto. Jugador corpulento, que anota y crea desde el poste bajo, debido a sus fundamentos ofensivos y fuerza. A jugadores altos los ataca desde el perímetro, penetrando o con lanzamiento exterior. La viva imagen del alma argentina, carácter, garra y ambición.
Walter Herrmann: 2´04 y buena capacidad atlética. Ya no es el que era a la hora de ir al aro, los años no pasan en vano. Buen tiro desde 3-4 metros y gran anotador en transiciones. Aporta en el rebote, tanto ofensivo como defensivo. Sabe definir en el poste contra jugadores más bajitos que él.
Pívots:
Luis Scola: El mejor jugador del plantel. Talento por doquier y gran diversidad de recursos ofensivos. Movimiento de pies perfecto. Inteligencia, garra y agilidad. Buen lanzamiento desde media distancia y tremendamente efectivo en el Pick and Roll y Pick and Pop. Suple sus centímetros y kilos en la pintura con oficio, lucha e intensidad.
Leo Gutiérrez: Inteligencia, experiencia y buen lanzamiento exterior, especialmente desde el 6´75. Poquito más, pienso que está en este mundial por la falta de interiores en Argentina. Física y defensivamente es una broma, sufre mucho. Y el rebote es una utopía para él.
Matías Bortolín: Ausencia de potencia física. Jugador veloz y ágil, de poco peso. Ataca a sus emparejamientos de fuera hacia dentro, desde el drible, haciendo bastante dañó. Huye del contacto. Aporta en el rebote y el lanzamiento exterior es su principal lastre.
Marcos Delía: Joven y atlético. La mayoría de sus puntos llegan tras asistencia del compañero cerca del aro o tras rebote ofensivo. De espaldas al aro no se desenvuelve mal, pero es irregular y un pelín tosco. Gran jugador defensivo y pésimo en el lanzamiento exterior.
Tayavek Gallizzi: Le faltan centímetros para el puesto. Lo compensa con capacidad atlética, energía, potencia y agresividad. Su fuerte está en recibir y anotar cerca del aro, tras Pick and Roll, asistencia, rebote ofensivo…Incapaz de fabricarse su propia canasta.
Richotti y Giorgetti los dos últimos descartes de la selección.
Pronóstico: Llegarán a octavos de final, y ahí caerán.
Razón: No tendrán problemas para pasar de grupo, la primera plaza dudo mucho que la consigan porque veo a Croacia muy superior. La 2º o 3º plaza de grupo creo que será su realidad. A partir de ahí, cruces con el grupo de España, es decir, Brasil, Francia o Serbia. Y a priori, veo a la albiceleste un peldaño por debajo de esas 3 selecciones. Pero bueno, menos tenía la albiceleste futbolera en este mundial de Brasil y llegó a la final. Si algo tienen los argentinos es que pelean como gladiadores, y eso en el deporte es media vida.
Deja un comentario