Casi tres semanas después y con cuatro partidos a domicilio de por medio, el Real Madrid vuelve a jugar en el Palacio. La ocupación del pabellón por otros eventos (es lo que tiene jugar gratis) ha obligado al equipo blanco a disputar cuatro partidos seguidos como visitante, y en plenas navidades. Los resultados no han sido del todo malos aunque las sensaciones de juego sí han sufrido altibajos. De lo poco que se compitió en Barcelona a una mejor imagen en Málaga, un buen tercer cuarto en Belgrado y una victoria gris en Andorra.
Con este panorama, y con las aguas algo más calmadas de lo que estaban el día 30, el Madrid recibe al Galatasaray, equipo al que ya se enfrentó la pasada temporada en el Top 16. El equipo turco, que se metió a última hora en esta fase, ha visto marchar a dos jugadores por problemas económicos. Nate Jawai y Pietro Aradori hicieron las maletas con rumbo a la ACB. Se han reforzado con dos norteamericanos; Jjustin Carter y Patrick Young. Junto a ellos, el líder de este equipo , Zoran Erceg, y la mano derecha de Ataman, Carlos Arroyo. El base puertorriqueño dirige y maneja a su equipo a la perfección, a pesar de que los años no perdonan. Erceg, que sonó para reforzar al Madrid en diciembre, está consolidándose como uno de los grandes del baloncesto europeo. Juega con la misma facilidad de «4» que sale al perímetro y enchufa triples. Verle jugar es una delicia. Las otras grandes amenazas vienen sobre todo de su juego exterior. Pocius, Guler, Arslan y Micov forman un perímetro de nivel, que competirá contra los Sergios, Rudy, Rivers y compañía.
Por parte del Madrid, serán duda hasta última hora Maciulis y Ayón, ambos con molestias en el hombro. Quizá es más preocupante lo del lituano, que recibió un golpe muy fuerte el pasado domingo pasando un bloqueo de Jawai. Interesante ver si Slaughter volverá a la convocatoria tras ser clave en la victoria ante Estrella Roja.
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