El partido que esta noche (20:45h) se juega en el Palacio de los Deportes tiene un nombre propio: KC Rivers. El escolta norteamericano, que fue fundamental en la consecución del póker de títulos de la pasada temporada, se vio obligado a marcharse del club tras no solucionarse su problema con el pasaporte cotonou. Debido al exceso de extracomunitarios que ya había en el Madrid, Rivers tuvo que hacer las maletas cuando todos esperábamos verle mínimo dos años más vestido de blanco, ya que ese periodo de tiempo era la duración de la extensión de contrato acordada con la directiva. «Sentía que el Real Madrid era de verdad mi casa», ha declarado el escolta antes del encuentro de hoy. Por si alguno todavía tenía dudas de si aplaudirle o no. Se espera ovación en el Palacio.
Puso rumbo a Alemania, al Bayern de Múnich, un equipo que tras no meterse en el Top 16 la pasada temporada se reforzó mucho y bien durante el verano. Además de la incorporación de Rivers, ficharon a Alex Renfroe del Alba Berlín y Maxi Kleber del Obradoiro, junto al regreso del pívot Deon Thompson, una de sus grandes referencias en la zona. Dirigidos por Pesic, los americanos del equipo marcan la pauta ofensiva, siendo los claros líderes del equipo, mientras que Kleber lidera el sector alemán del conjunto bávaro.
Tras perder en la primera jornada en Estambul ante el Fenerbahce, encadenan dos victorias consecutivas en el Audi Dome, ante el Khimki y el Strasburgo, y viajan a Madrid con la intención de romper la inercia que tiene este grupo, en el que los equipos que han jugado como locales no conocen la derrota.
Con Maciulis recuperado tras no jugar en Zaragoza, Laso contará con todos sus jugadores para el choque de esta noche, que el Real Madrid debe ganar sí o sí para no encarar con prisas y agobios la segunda vuelta de esta fase regular. El Palacio debe ser un fortín, y el propio técnico vitoriano pidió el apoyo del público esta semana: «es un partido grande de Euroliga y necesitamos el apoyo del Palacio».
Sobre la vuelta de KC Rivers, Laso destacó la importancia del escolta durante todo el año pasado: «jugó un gran baloncesto para nosotros. Espero que le vayan muy bien las cosas, pero que nosotros ganemos este partido». Rivers, por su parte, ha reconocido en una entrevista a Ricardo González en As sus sensaciones antes de jugar en la que fue su casa. Me quedo con una frase que remarca lo inesperado de su marcha: «me hizo daño. Había encontrado un equipo al que pertenecer, al que sentirme vinculado, pero a veces las cosas suceden así. El Madrid estará siempre en mi corazón. Porque crecí con el equipo, como persona y como marido, como compañero, como jugador… y disfruté de un año histórico. Sentí que el Madrid era de verdad mi casa».
@pablohm29
Deja un comentario