Tras el parón de las ventanas FIBA y dos derrotas consecutivas en Europa entre medias, el Real Madrid vuelve a la competición doméstica este domingo, donde es líder en solitario. Para volver a ensederezar el rumbo, deberá ganar al siempre complicado Herbalife Gran Canaria en el Palacio de los Deportes (18:30 en 0#)
Este será el segundo enfrentamiento de este año con los canarios, ya que las dos escuadras se enfrentaron en las semfinales de la Supercopa de España, con victoria para los de Luis Casimiro por 73-64, en un duelo donde fueron muy superiores a los de Laso.
Aparte de Carroll, el partido será muy especial para Tavares, que se medirá al equipo que le formó y donde mostró su mejor versión, de momento, muy alejada, de la pobre que está mostrando en estos inicios como madridista, aunque aún debe acoplarse a sus compañeros y al sístema de Laso.
Aunque los precedentes ante los canarios son buenos jugando de local, los amarillos ya asaltaron la pista madridista la pasada campaña, cuando ganaron por 81-93. Previamente, los merengues habían conseguido llevarse el gato al agua las últimas 10 temporadas.
Ante la plaga de lesiones en el club blanco, se espera que los veteranos empiecen a dar el paso adelante que no están dando en Euroliga y no dejen toda la responsabilidad sobre Doncic, ya que por muy bueno que sea, no deja de tener 18 años y no puede tener todo el peso del equipo.
El buen momento en el tiro esta campaña de Rudy con más de un 50% desde el 6,75 y la experiencia de Reyes, deberán ser algunos de los pilares a los que debe agarrarse el Madrid, que tendrá que hacer un ejercicio de supervivencia hasta la Copa del Rey debido a su plaga de bajas.
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