Tras el inmejorable estreno en Euroliga el Real Madrid vuelve a jugar ante su afición en la cuarta jornada de la ACB. El rival en esta primera matinal de domingo en el Palacio será un histórico como el Joventut, que llega con un balance de 1-1 (su primer partido de la temporada en Lugo se suspendió).
El conjunto de Badalona, dirigido por Carles Durán, cuenta en teoría con una plantilla de garantías para no sufrir tanto por lograr la permanencia. Uno de los grandes responsables de esa salvación en la pasada campaña fue Laprovittola, que parece haber encontrado su sitio en la Penya tras una época de irregularidad en Vitoria y San Petersburgo. Junto a él destaca Marko Todorovic, canterano del club y un viejo conocido de la liga que regresa tras varios años de irrelevancia en el Khimki. A estos dos nombres, quizá los más conocidos de cara al público europeo, el equipo verdinegro sigue apostando por canteranos como Dimitrijevic, López-Arostegui o Albert Ventura que siguen manteniendo la esencia de lo que siempre ha sido la Penya.
Por su parte, el Real Madrid de Pablo Laso (que hoy cumple años) llega lanzado, con un juego más propio de abril o mayo que de principios de temporada y con jugadores como Anthony Randolph más centrados que nunca. El ala-pívot parece haber aprovechado su oportunidad ante la baja de Trey Thompkins y la incógnita sigue siendo conocer si mantendrá esta concentración a lo largo de todo el año. Ayón sigue en México y habrá que ver si Laso decide rotar y repartir minutos entre los que menos jugaron el jueves ante el Darussafaka.
Y tras este encuentro la temporada alcanza velocidad de crucero en Europa ya que el Real afrontará la primera semana de doble jornada: miércoles en Milán y viernes en el Palacio ante el Baskonia.
Pablo Herrero – @pablohm29
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