Triunfo sufrido del Madrid contra el Fuenlabrada después de un mal arranque de partido. Llull y Carroll fueron los más destacados del equipo en ataque con 21 y 16 puntos, y en el cuadro madrileño fue Eyenga el que estuvo acertado con 19. Randolph ayudó en el tercer cuarto y Tavares fue clave en la intimidación del aro.
El primer cuarto fue el colmo de todo lo malo en una cancha de baloncesto. El equipo entró frio y ninguno estuvo acertado durante los primeros 10 minutos. En defensa, la concesión era continua y Eyenga se aprovechó de ello anotando 7 puntos casi consecutivos. Ni dos tiempos de Pablo Laso en un minuto fueron suficientes para la reacción. Al final, 12-27.
Pero en el segundo cuarto Carroll y Llull se pusieron las pilas y el partido cambió totalmente. Entre los dos sumaron 24 puntos y lograron darle la vuelta al choque. Además, en defensa la cosa dio un giro de 360 grados y el Fuenlabrada anotó únicamente 13 puntos en este acto. Al descanso, mandaba el equipo de Laso por tres puntos. 43-40.
Después del descanso, Laso decidió dar entrada a Randolph y a Taylor que no habían jugado ningún minuto y la intensidad defensiva creció. Además Llull y Campazzo estuvieron los dos en la cancha y la dirección del juego fue mucho mejor. Fuenlabrada se atascó desde el triple y dos acciones impresionantes de Randolph daban la máxima del Madrid hasta entonces. Más 10, 61-51 a falta de dos minutos. Al final del tercer cuarto, 68-59 con Carroll y Llull aportando a la estadística con 16 y 15 puntos respectivamente.
Y en el último cuarto se apagaron las luces al principio. En 4 minutos solo fuimos capaz de anotar desde el tiro libre y Fuenlabrada bajó la renta a dos puntos, 71-69, que obligó a Laso a pedir un TM. Los últimos minutos estuvieron cargados de imprecisiones por parte de los dos equipos, y solo Llull y Campazzo aportaban en ataque. Y fue Causeur quien cerró el partido con dos acciones consecutivas que permitió al Madrid volverse a escapar por encima de los 10 puntos. Al final, 89-79.
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