Tras dos derrotas seguidas -y ambas muy abultadas- en la máxima competición continental el Real Madrid volvió a ganar, que viendo nuestra situación actual era lo único que importaba. Sobrevivir.
Sin Llull, Rudy ni Taylor, los locales salieron con Laprovittola como base titular y el argentino fue el protagonista para bien y para mal de los primeros minutos. Sumó dos triples con la misma facilidad con la que luego encadenó dos errores seguidos pero la buena dinámica del equipo en defensa, con Tavares ejerciendo de muro ante Lauvergne, limitaba mucho las opciones de anotar de los lituanos y la ventaja pronto empezó a crecer. Hasta cinco triples anotó el Real en el primer cuarto (Causeur, Deck y Garuba) y solo dos aciertos en el último minuto de Jankunas, uno de ellos sobre la bocina, impidieron que la diferencia fuera aún mayor tras los diez primeros minutos (21-13).
La salida de Tyus a pista no afectó tanto al equipo como en partidos previos y el pívot, en sus mejores minutos de blanco, estuvo muy activo en defensa. Los fallos se sucedían y a pesar de todo el Madrid igualó la máxima de la noche tras un mate de Abalde, que tuvo un bonito duelo con Grigonis.
.@albertoabalde6 turns the corner and THROWS it DOWN!#7DAYSMagicMoment pic.twitter.com/TShtq0uLxx
— Turkish Airlines EuroLeague (@EuroLeague) February 25, 2021
El Zalgiris no se vino abajo y con dos triples consecutivos de Hayes redujo la desventaja hasta el 28-23 a cinco minutos del descanso. El tiempo muerto sentó bien a los de Laso, que volvieron a defender y con un par de canastas en transición colocaron de nuevo el +11. La dinámica del partido, sin embargo, era de parciales y los lituanos fueron poco a poco encontrando situaciones de tiro cómodas en la zona con Walkup tirando de los suyos y el resultado al descanso resumía bastante bien la igualdad del primer tiempo (36-31).
El ritmo del choque, lento y de baja anotación, favorecía a los intereses del Zalgiris y los primeros minutos del tercer cuarto fueron buena muestra de ello. El Madrid solo anotó tres puntos en los cinco minutos iniciales y las malas decisiones y las pérdidas se sucedían hasta el punto de que los visitantes se colocaron a uno (39-38, minuto 26) gracias a un 0-7 de parcial. El toque de atención de Laso a los suyos funcionó y dos triples de Deck y un contraataque de Causeur dieron aire al Madrid. Los fallos se sucedían y el cuarto finalizó con una canasta de Alocén sobre la bocina que ponía el 51-42 con diez minutos por delante.
Ante los problemas para anotar el Madrid se agarró a una constante de los últimos diez años: Jaycce Carroll. El escolta fue el gran referente anotador en el último cuarto y con sus triples y bombas en penetración dio la máxima de la noche (59-46) con seis minutos por jugar. Trey, que sumaba unas semanas algo grises, se sumaba a la fiesta con otro acierto desde el perímetro para poner el +16 y prácticamente sentenciar el partido, rubricado con el cuarto triple de la noche de Deck. El choque, por cierto, tuvo la curiosidad de que los blancos lanzaron un total de ¡cero! tiros libres.
El marcador final (70-58), algo engañoso, da aire al Real Madrid que se mantiene en la pelea por las cuatro primeras opciones y suma un triunfo necesario y casi obligado viendo el calendario que queda por delante. Y la próxima semana, doble compromiso en Rusia ante Khimki y Zenit.
Foto portada: Euroleague.net
Pablo Herrero – @pablohm29
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