Felicidades al Barcelona por su Liga Endesa 2014/2015. Un 3 – 1 en la final demuestra que fue superior a un Real Madrid, que perdió la liga cuando hinco la rodilla en Euroleague. Desde entonces el equipo ha empezado a perder todo ese “nirvana” que emanaba, a pesar de los problemas de lesiones y del cansancio de la temporada. Es duro decir que perder una competición como la liga, dominada durante 9 meses, cuando se falló en el Día D que tenían marcado jugadores, técnicos y gran parte de la afición. La final de la Euroleague puede haber destruido una de las historias más bellas del baloncesto del Real Madrid, tornándose en el tormento habitual que ha seguido a la sesión desde que tengo uso de razón.
Aquí seguramente todos sean culpables. Desde directivos a la hora de no lograr fichar piezas que se caían y ponían en riesgo la salud de los jugadores importantes (lesiones de Darden y Carroll) por falta de huevos ante el corazón del club. Me niego a pensar que por auto-complacencia. 2º el Madrid de baloncesto ha caído desde el año pasado en ese “mensaje” de que solo vale ganar la Euroleague (o la décima en caso del fútbol). Un mensaje que impone una presión extra y supone, si no se logra, en un desencanto emocional muy duro. Se ha visto en el Palacio y como tras la final, las dudas sobre un equipo ha aflorado hasta hoy. El que escribe piensa que el ciclo de Pablo Laso ha llegado a su fin y salvo Rudy, Chacho, Llull y Felipe, ningún jugador ahora mismo estaría a salvo de ver su cabeza en una pica…digo fuera del equipo.
Tampoco se salvarán los jugadores, pues si en la derrota ha aflorado sentimientos que tapaban las victorias, denota poco carácter de muchos jugadores. Tendrán muchas razones, pues hemos visto a Rudy jugar con un dedo roto dos meses. A Carroll con las grapas recién quitadas y a Mirotic, con una fascitis plantar. Todos han buscado dar la cara pese a que no siempre les acompañará la suerte. Sobre Mirotic, mucho se habla de que su final de temporada está manchado por falta de feeling con Laso desde mayo. ¡Cuánto daño hiciste Maccabi! Tiempo tendrán para reflexionar todos si vuelven a verse en octubre en el mismo vestuario.
Sobre Laso, tenía todas las dudas de ver a un entrenador que no había pasado de salvar a un equipo en acb. Verle delante de un miura me parecía una locura. Su carácter le ha llevado lejos y una apuesta valiente por el juego de ataque, pero sus carencias se ven cuando se baja al barro y la alegría por si sola, no gana partidos. Creo que llegará otro entrenador con más nombre. El tiempo dirá si es bueno o malo. Si llega, que le dejen trabajar. A Messina solo le dejaron trabajar apenas 2 meses. Y nadie pondrá en duda el CV de Ettore cuando llego al club. Si Laso continua, aparte de aprender de sus errores, cosa que ha hecho cada año, espero algo más de mano dura. Quizás es hora de que del salto a ser un entrenador más autoritario.
Y sobre este partido, el Barcelona demostró que estaba preparado para ganar. Durante 30 minutos mantuvo una renta de 5 puntos, de la mano de Tomic en un partido majestuoso (otro más contra sus ex. QUE DUELA) y el acierto en el triple de nuevo letal. El Madrid saco su amor propio. Nunca dejo de pelear pero se fue desesperando, CON SUS PROPIOS ERRORES. Recuerdo un triple de Llull y un triple de Rudy fallados al final del segundo que podía haber dejado el 47-42 del descanso en un partido de una canasta. Ese triple, esa canasta que hace un mes metían todos y cada uno de los jugadores del Madrid, hoy no entraba. Entre medias se veía venir un arbitraje horrible para el partido.
En el tercer tiempo, la desesperación del Real Madrid, personificada en la descalificante a Pablo Laso parecía dar la puntilla a la final acb. El Barcelona ponía la renta en +10 y festejaba. Solo quedaba el final digno. Lo que paso es que llego el famoso miedo a ganar. Ese miedo que distingue a los muy grandes, de los grandes. El Barça empezó a temblar de piernas y el Madrid hizo el esfuerzo titánico, que muy pocas veces ha lucido en la final, incluso en el partido que gano, de acercarse, pulgada a pulgada, 3 y inches y carrera por el medio del running back. Tiro libre a tiro libre, pero el triple para poner por delante o la canasta jamás llego. Se llegó a empatar a 76 a falta de un minuto para el final.
Todos temblando, el Barça regalando la bola, el Madrid incapaz de que la diosa fortuna le diera premio y la pelota llego a Lampe, el que estaba fuera en diciembre del Barça para matar la final con un triple. El “chacho”, muchas veces héroe y bandera del equipo, fallo los tiros que ha metido en todos los partidos, salvo en estos últimos. Darden puso el miedo en cuerpo al Barça con un triple agónico, pero no quedaban segundos y al Barça, esta vez no se desangro en el tiro libre. Final 83-81 con la canasta final de Reyes y despedida de la temporada. MVP para Navarro para enardecer su figura, olvidándose de Tomic y un arbitraje para para no olvidar, de lo malo que fue. Pero el Madrid no perdió por los árbitros. Hoy perdió porque ya había perdido en Milán hace un mes.
Por cierto Xavi Pascual, eres ahora mismo el mejor entrenador de Europa (Blatt se ha ido a Cleveland) pero tu plantilla puede enamorar. No solo cuando hay que jugarse el título. Quizás eso será lo que busca el Madrid si Laso se va. Yo solo pido que quede la esencia de un baloncesto alegre que enganche a la gente.
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