El verano ha terminado y con la llegada del otoño ha dado comienzo por fin el baloncesto nacional, primero con la disputa de la Supercopa ACB la semana pasada y este fin de semana con el esperado retorno de la Liga Endesa
Este domingo a partir de las 12:40 el Barclaycard Center (para nosotros siempre seguirá siendo nuestro Palacio) se viste de gala por primera vez esta temporada para presenciar el duelo entre el reciente campeón de la Supercopa, el Real Madrid, y el conjunto insular del Herbalife Gran Canaria.
Con el todavía sabor agridulce procedente de la Final ACB de la temporada pasada en la que se cayó por un global de 3-1 con el Barcelona de Xavi Pascual, el conjunto dirigido por el vitoriano Pablo Laso, cuya labor fue muy discutida llegando a estar en verano con pie y medio fuera del club, afronta la competición doméstica con ganas de resarcirse y volver a alzarse con el título liguero.
Su primera prueba de toque será el Herbalife Gran Canaria de Aíto García Reneses, que intentará hacer olvidar más pronto que tarde el excelente recuerdo que ha dejado Pedro Martínez en la afición canaria. El siempre competitivo conjunto amarillo se ha movido muy bien este verano. Con las altas de Txemi Urtasun y Kyle Kuric suman calidad y experiencia a su línea exterior, que contará además con el descaro del joven Oriol Paulí, canterano del Barcelona que militará las próximas cuatro temporadas en el Herbalife. También han reforzado su juego interior, apuntalando su pintura con Lavon Kendall, ex de Obradoiro donde causó una gran impresión, y el americano DaJuan Summers. Mantienen en la plantilla a la excelente dupla Báez-Tavares, sobre la cual debe girar el equipo.
Los hombres de Laso llegan a este comienzo de temporada en buen momento. Tras unas pequeñas dudas en los primeros partidos de pretemporada el conjunto madridista ha demostrado en la Supercopa, en la cual sufrió en semifinales contra el Valencia Basket y ganó fácilmente en la final al Barcelona, que no es menos equipo que los azulgrana dando el primer golpe encima de la mesa. Las altas de Ayón, Maciulis, Nocioni, Rivers y Campazzo intentarán hacer olvidar las bajas de Draper, Díez, Darden y sobre todo la de Nikola Mirotic, que puso rumbo a Chicago para probar suerte en la NBA. Estas incorporaciones sumadas a la permanencia en el equipo del Chacho, Llull, Carroll, Rudy, Felipe, Bourousis, Slaughter y Mejri hacen que la plantilla del Real Madrid cuente con una rotación larga y de calidad para aspirar a todo.
El nuevo Real Madrid quizá cuente con menos talento, pero seguro lo hace con más sangre y sacrificio en la pista, siempre bajo la premisa de hacer disfrutar al Palacio con ese baloncesto rápido y vistoso que ha enamorado en toda Europa.
Este año, a diferencia de los anteriores, la directiva madridista ha visto oportuno contar con una plantilla de 13 jugadores, por lo tanto en cada partido de Liga Endesa veremos cómo Pablo Laso se ve obligado a realizar un descarte. El primer perjudicado esta temporada será Marcus Slaughter, que con la llegada de Ayón verá reducidos sus minutos esta temporada y volverá a ver a su equipo desde la grada como ya sucediera en los dos partidos correspondientes a la Supercopa.
Se alza el telón de la ACB para nuestro ilusionante Real Madrid, es el momento de volver a reinar en España.
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