Hace unas semanas la FIBA amenazaba con crear un cisma en el baloncesto europeo al ofrecer a los principales clubes de baloncesto de Europa un nuevo modelo de negocio para el baloncesto a través de una nueva liga europea que competiría frontalmente con la actual Euroliga y que garantizaba unos ingresos de explotación superiores para los clubes participantes de, aproximadamente, 30 millones de € por temporada a repartir entre todos los participantes.
Sin duda, un jaque a la propia Euroliga y a su director, Jordi Bertomeu, que no ha tardado en presentar su contra-oferta a los clubes con una propuesta que, además de aumentar los ingresos previstos por temporada (36M€), tal y como nos ha explicado nuestro compañero Pablo Herrero en este artículo, reduce el número de participantes a 16. El acuerdo ya ha sido suscrito por todos los clubes, (excepto el PAO, cuyos propietarios siguen en un litigio continuo con el propio Bertomeu), lo que significa que la próxima temporada los principales clubes europeos de baloncesto seguirán disputando sus encuentros en la máxima competición continental bajo el amparo de la Euroliga. Las cinco plazas que no serán fijas se distribuirán entre el ganador de la Eurocup, el vencedor de una fase previa entre ocho equipos (se desconoce qué equipos la disputarán) y tres ganadores de ligas nacionales, aún por determinar pero que desde varios medios de comunicación avanzan que serán los campeones de la liga alemana, la liga báltica y la liga adriática como probables destinatarios.
Como madridista, honestamente pienso que el formato de competición que propone Bertomeu es positivo para nuestro club tanto desde el punto de vista económico como deportivo.
ECONÓMICO:
El primero, y más inmediato, el incremento de ingresos del club por participar en dicha competición se incrementarán. Si bien esas últimos años el Real Madrid ha conseguido llegar a cifras de ingresos totales por temporada superiores a los 10 millones de €, con el nuevo modelo de negocio propuesto por Euroliga fácilmente podremos superar esa cifra y seguir avanzando hacia un menor déficit presupuestario sin tener que estar cada verano a expensas de lo que se decida en la Junta Directiva de turno en función de los fichajes que se vayan a realizar en el fútbol. Por otro lado, el hecho de que se garantice la presencia de determinados clubes, como Olympiacos, Maccabi, CSKA o Fenerbahce, es un fuerte incentivo para que podamos incrementar todavía más los ingresos por explotación en el Palacio de Deportes: mejorar asistencias al pabellón, incremento de ingresos de sponsors y explotación comercial de palcos vip, además de los derechos de TV. Nadie duda que, a priori, es mucho más atractivo presenciar en directo un Real Madrid vs CSKA, un Real Madrid vs Maccabi o un Real Madrid vs Olympiacos cada semana, que no competir en una primera fase ante equipos con plantillas de un nivel más flojo. Lógica pura. Y si garantizas la presencia de los clubes más importantes de Europa en tu competición, aumentarás el interés de tu liga como producto televisivo y escaparate para sponsors y marcas que solo invierten en tu competición si su producto va a estar ligado a marcas tan potentes como la del Real Madrid, Barcelona o PAO.
DEPORTIVO:
Si reduces el número de participantes, aumentará el nivel competitivo. Los clubes incrementarán sus ingresos, por lo tanto, tendrán mejores presupuestos para confeccionar plantillas más competitivas. Y por otro lado, aquellos clubes que ahora mismo compiten en Euroliga pero que no entran dentro de la nueva cuota de clubes en el formato de la próxima temporada pasarán a competir en la Eurocup, incrementando el nivel deportivo de esta segunda máxima competición continental que, debo ser sincero, ahora mismo es una liga con un nivel competitivo muy pobre. Que el Herbalife Gran Canaria, equipo que en ACB no suele asomar la cabeza en playoffs más allá de los cuartos de final, llegue a las últimas rondas clasificatorias es un claro ejemplo de que se necesita revalorizar la Eurocup.
¿Estoy a favor de la Euroliga de 16 equipos? Rotundamente sí. ¿Y tú?
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