El Real Madrid ha sido incapaz de certificar en esta tarde de jueves su clasificación a cuartos de final de la Euroliga tras caer derrotado por un apretado 87-84 en Estambul ante el Galatasaray de Ataman.
Desde el principio del encuentro hemos visto a un Real Madrid incómodo sobre el parqué del Abdi Ipekci. Los locales, acertadísimos desde el triple, impedían a los de Pablo Laso imponer el ritmo deseado. La primera canasta de dos puntos de Galatasaray la protagonizaría Austin Daye, el mejor de los suyos hoy, a falta de tan solo 3:26 para la finalización del primer cuarto. El Real Madrid no carburaba y llegábamos con un resultado de 25-20 para los turcos tras el primer parcial.
Doncic, que había entrado un par de minutos antes de acabar los diez minutos iniciales, sería el encargado de llevar la batuta tras este primer descanso. Bajo los mandos del esloveno, el Real Madrid reaccionaría. Encontraba a Randolph, encontraba a Ayón o sencillamente encontrándose a sí mismo, Doncic dirigía a los suyos a un parcial favorable con él en pista una vez más. No obstante el poder perimetral de Galatasaray seguía haciendo acto de presencia de la mano esta vez de Guler y Diebler, que acababan con las esperanzas merengues de llegar por delante al ecuador del encuentro, al que se llegaría con una ventaja turca de 49-46 tras anotar casi sobre la bocina Alex Tyus.
Tras el paso por vestuarios se vería la peor versión del Real Madrid. Con un quinteto eminentemente defensivo, los de Laso se mostraban inofensivos de cara al aro turco y hacía aguas en defensa ante el acierto rival. Además Tibor Pleiss, ex de Baskonia y Barça, se hacía el dueño de todo rechace, lo que provocaba más ocasiones de tiro para Galatasaray que sus acertadísimos tiradores no estaban dispuestos a desaprovechar. Un cuarto para el olvido que llegaba a situar la máxima renta para Galatasaray en 18 puntos tras, cómo no, un triple de Diebler (73-55), que al final se vería reducida a 73-60 gracias al buen hacer de Rudy y Doncic, los mejores hoy del lado blanco junto con Anthony Randolph.
Si algo no se le puede reprochar a este equipo es que nunca baja los brazos. Laso decidió empezar el último cuarto con un quinteto formado por Doncic, Carroll, Rudy, Randolph y Hunter. La versatilidad de casi todos ellos dio alas al conjunto blanco que, de la mano una vez más de Doncic (inexplicable su ausencia hoy en determinados momentos del choque), volvía a encadenar un parcial favorable que lograba remontar el partido a 4:37 del final (80-81). Un triple de Carroll tras varias malas decisiones de ambos conjuntos parecía terminar de encarrilar la victoria madridista a falta de dos minutos (80-84), pero Diebler correspondía con su quinto lanzamiento desde la línea de tres anotado sin fallo. No anotaría más el Real Madrid, que entraba en un colapso inexplicable tras haber logrado remontar una renta tan amplia. Tyus volvía a poner por delante a los suyos y Daye, desde la línea de personal tras el enésimo mal ataque madridista en los últimos instantes del choque, sentenciaban el partido (87-84).
De esta forma el Real Madrid encaja su sexta derrota en Euroliga y ve cómo su racha de nueve victorias consecutivas en la competición toca a su fin. Pese a la derrota, los de Laso seguirán al frente de la tabla una semana más, pero dependerá de resultados ajenos para certificar en esta jornada su pase a los playoffs. De momento tocará esperar.
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