Según el diccionario de la Real Academia Española, el término paciencia responde a aquella persona que es capaz de soportar o padecer algo sin alterarse, o aquella persona que es capaz de esperar algo aunque su deseo sea muy alto. Cualquiera de estas acepciones pueden servir para describir al protagonista de este artículo, Facundo Campazzo.
Su primera temporada en el club blanco, con una competencia tremenda en su puesto, el puesto de base estaba formado por Sergio Llull y Sergio Rodríguez, fue muy difícil para Facundo, llegando a quedarse fuera de las convocatorias finales por el empuje de un “desconocido” Luka Doncic.
Pero en su camino apareció Murcia, donde de la mano de Fotsis Katsikaris, dio un paso adelante, lideró al equipo y llevo al conjunto murciano a cotas nunca antes exploradas. En estos dos años, jugó los playoffs de Liga Endesa, eliminado por el conjunto que poseía sus derechos, el Real Madrid.
Paseó al conjunto por la segunda competición continental, donde su gran papel le llevo a ser nombrado en el segundo mejor equipo de la competición.
Tras su paso por Murcia, recibió la llamada de Pablo Laso, él era el jugador que necesitaba el Real Madrid para suplir la baja de Sergio Llull. Su pareja con Luka Doncic, debía ser la que empujase al equipo hasta la recuperación del base menorquín.
Pero esto es el Real Madrid y en este club nada vale, empezaron las preguntas y las quejas; ¿este chico vale para la Euroliga?, ¿como va a defender a los bases altos?, ¡Esto es el Real Madrid, como va a jugar alguien que viene del Murcia!.
Pero el base de Córdoba, calló, bajo la cabeza y se puso el mono de trabajo. De repente, como si de un guión de Hollywood se tratase, lo que antes eran dudas y quejas, tornaron en gritos de exaltación, en manos a la cabeza y en victorias que subían al casillero blanco tanto en Liga Endesa como en Euroliga. Y el final es de sobra conocido por todos, la temporada terminó con una Euroliga conquistada en Belgrado y una Liga Endesa para el conjunto blanco.
Para seguir con el guión establecido, de que nada en este club es fácil, esta temporada comenzaba con Luka Doncic cruzando el charco rumbo a Dallas. Por lo tanto, la pareja de bases estaría formada por Sergio Llull , Campazzo y el joven Melwin Pantzar.
La temporada fluía, los dos compartían minutos y protagonismo, pero tras el final de la liga regular de la Euroliga, salta la noticia, Sergio Llull se pierde los playoffs por una lesión. Otra vez fluyen las dudas en la siempre temerosa afición blanca, ya que, enfrente tendríamos a un de sobra conocido por todos, Nick Calathes.
Pero al igual que en esta entidad no hay nada fácil, para Facundo Campazzo no hay nada imposible, en estos playoffs el base argentino, no solo ha demostrado su total valía para jugar en la máxima competición continental, sino, su total valía para liderar un equipo.
Ya no solo tiene la capacidad para hacer jugar al equipo, ahora mismo lidera, anota, asiste y defiende. Tira del carro, conecta a la afición y al propio equipo, mientras que los rivales parecen preguntarse cuando se le agotaran las pilas, a este pequeño demonio incansable.
Porque en la paciencia, es donde radica la capacidad de los genios para triunfar, en ese momento donde el trabajo oscuro y sufrido, comienza a dar sus frutos y en ese momento ves que todo valió la pena.
Para terminar, una frase de Jean-Jacques Rousseau, que representa perfectamente todo el trabajo de Facundo Campazzo al servicio de el club blanco:
“La paciencia es amarga, pero su fruto es dulce”
Foto vía ( Agencia EFE/ Javier López Hernández)
Deja un comentario